Lunas de miel para enamorarse del interior de España

Otro de los puntos fuertes del país es su variada y saludable gastronomía, basada en una firme apuesta por el producto local: carnes, pescados, verduras y legumbres de alta calidad para agradar a cualquier comensal. Una experiencia única es probar la mezcla de tradición y vanguardia que reúne la alta cocina y visitar alguno de los más de 270 restaurantes distinguidos con Estrellas Michelin.

Además de los Parques Nacionales de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici, en Lleida, y Ordesa y Monte Perdido, en Huesca, allí se ubican algunas de las mejores estaciones de esquí de España, como Baqueira-Beret, Cerler o Formigal. Los paisajes de cuento de la comarca del Valle de Aran, en pueblos como Vielha, el encanto medieval de conjuntos históricos como Aínsa o sumergirse en las aguas de uno de los balnearios más antiguos de Europa, como el de Panticosa, en el valle de Tena, son opciones ideales para el relax.

Ya en Castilla y León, otro enclave inspirador es la vecina comarca de El Bierzo (León), presidida por la imponente silueta rojiza y escarpada de las montañas que conforman Las Médulas. ¿Sabías que los romanos instalaron allí una mina de oro y ese fue el origen de la apariencia actual de este peculiar paraje declarado Patrimonio Mundial? Este paraje cuenta con un centro de recepción de visitantes que ofrece visitas guiadas para conocer en profundidad la historia de este milenario yacimiento.